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`Mejoras’ por Casiano López

casianolopezCUADERNO DE APUNTES
Casiano López Pacheco – 19/09/2013

Ahora que ha transcurrido un año más de la Feria y Fiestas de Ubrique, con su chaparrón tradicional inclusive, y la Virgen de los Remedios ha retornado a su casa del Convento, se pone con este acto simbólico y especial punto y final a los ritos circulares con que se cierra de nuevo el largo y caluroso estío.

Un verano tranquilo y monótono que se transforma en un septiembre efervescente y lúdico, pleno de festejos y actividades con que el extraordinario pueblo de Ubrique da sobradas muestras de la interesante vida que bulle por sus venas. Porque septiembre es el mes de la PINTURA por excelencia, sin la más mínima discusión. Confluyen, casi se agolpan en una veintena de días contados, la exposición que se celebra en el Callejón del Norte “Arte para todos”, que ya va por su VI edición, aumentando el número y la calidad de sus participantes.

A ello se le suma el Concurso de pintura al Aire Libre, convocado entre el Ayuntamiento y el mecenazgo de varios patrocinadores, que asumió el espíritu y el testigo del que  fue su primer organizador y alma mater, Cristóbal Ríos, en las Cuatro Esquinas, para que éste no despareciera. Como se ha podido comprobar este año, por el número de participantes y la calidad de algunas obras, sigue gozando de buena salud, aunque nunca llueva a gusto de todos-as cuando el Jurado hace público su dictamen, siempre controvertido por muy especialistas y doctos en la materia que sean.

Pero la guinda de este esplendor pictórico recae en el Certamen Andaluz de Pintura, que también convoca el Área de Cultura del Ayuntamiento. Y aquí es donde voy a detenerme un poco, porque es necesario plantear una serie de reformas , que creo -a título personal- ha llegado el momento de acometer.

Desde los tiempos –parecen ya arcaicos o remotos- de las primeras ediciones  de este concurso, que entonces era de carácter Regional, y que nace a la par que da sus primeros pasos la Asociación de Amigos del Arte de Ubrique, grupo de amigos que se reúnen con el único afán de disfrutar y difundir el mundo de la pintura, potenciándola en sus diferentes manifestaciones y variantes, ha llovido mucho y ocurrido muchas cosas también.

El primer rasgo importante fue que la participación era espectacular. Desde los más pequeños (una forma de potenciar la cantera) a los más grandes (aficionados o profesionales) todas las obras presentadas, incluso en 3 filas  o sobre caballetes, en el Salón de Actos antiguo de la Escuela Redonda, se exponían. Y no se quedaba nadie fuera. Y el nivel crecía año por año. De ahí la increíble cantidad de licenciados en Bellas Artes que distingue a Ubrique entre tantas localidades. Nada nace por azar ni por generación espontánea.

Con el paso de los años y la huella de los diferentes gobiernos municipales, se mejoraron ciertos aspectos y se empeoraron otros. Después de tener una Sala de Exposiciones en la Casa de la Cultura, ésta terminó perdiéndose y nunca se pensó en serio en habilitar, crear o construir un nuevo espacio expositivo que diera satisfacción a tanta demanda justificada. Lo que vino después fueron parches y remiendos.

Incluso se separaron las categorías -la Regional, ahora Andaluz, y la Local- con distintas fechas cada una, dejando desaparecer los apartados Infantil o Juvenil -mala cosa- si se piensa en el futuro.

Continuará…

conventodecapuchinos

CUADERNO DE APUNTES
Casiano López Pacheco –
26/09/2013

Me remite la amiga Eva Ríos, del Ayuntamiento, un correo y me avisa de que los Concursos Infantil y Juvenil de Pintura en Ubrique no han desaparecido, como yo aventuraba en la primera parte de este artículo. La única diferencia, matiza, es que ahora se convocan por separado y a los niños se les pone un tema distinto cada año. Gracias , de nuevo, por la apostilla, que hago constar aquí.

Bien, me alegra y tranquiliza saberlo, porque soy de los que creen firmemente  que en los niños y en los jóvenes recae la esperanza de un mundo mejor, a pesar del lastre de los recortes en Educación que se vienen aplicando con rudeza desde gobiernos de supuesta izquierda, como el andaluz, o bien desde la derecha cavernícola que rige desde la Villa y Corte, en Madrid. Pero eso es harina de otro costal y ya le dedicaremos su tiempo en otra ocasión.

Retomo entonces a lo que iba. A la incapacidad latente o manifiesta de aquellos que han regido o rigen la política cultural  local de proporcionar al pueblo de Ubrique  de una Sala de Exposiciones en condiciones de una vez por todas, o en su defecto, una red de pequeños espacios expositivos que permitan exponer todos los cuadros que se envían, por ejemplo, al Andaluz de Pintura que se convoca cada año por septiembre, aparte del calendario de exposiciones individuales o colectivas que se prevean anualmente. Con esta solución, nadie se quedará sin ver las obras de algunos artistas con trayectoria que simplemente quedan sin mostrarse al público, junto con la algunas jóvenes promesas que tampoco son dignas, al parecer del Jurado de turno (doctos profesores universitarios muy versados en el tema y muy conocidos en el mundillo artístico) de pasar una simple preselección.

Un Jurado al que le da exactamente lo mismo que se presenten 80 obras que 35, aproximadamente, como este año, dada la persistente unanimidad en escoger desde hace un lustro a los mismos de forma repetitiva y con escasas variantes, lo cual deja en evidencia lo limitado de su visión al apostar siempre por fórmulas conocidas y seguras. Qué jartible el tema.

Cambiemos este rol de una vez. A quien le corresponda, que planifique con tiempo. Si quiere evitar el engorro de tener que recibir cuadros de gran formato, con el gasto que ello conlleva para el pintor que se arriesga al enviarlos, haga constar en las Bases que se envíe el C. artístico más un archivo fotográfico de la obra junto a las medidas, mediante un correo electrónico, para poder calcular el espacio de una sala, como la del Convento, plagada de máquinas que no facilitan una buena visión.

Realizada la primera criba por el Jurado designado al efecto, cuando llegue el momento, se solicita a los artistas agraciados que remitan sus obras al sitio especificado previamente y se procede después al Fallo. Si no es mucho gasto reúna en días diferentes a dos jurados distintos para que no tengan que fallar dos concursos en la misma jornada, tal como se viene haciendo con el de Pintura al Aire libre y el Andaluz de Pintura, en los que se dan cita parte de los mismos artistas que concurren a ambos concursos a la vez y así se evitan posibles suspicacias y malos entendidos.

Y una vez solucionados estos pequeños detalles y con una Sala de Exposiciones como Dios manda, muestren los cuadros que van a acompañar al Primer Premio, o que vayan destinados al catálogo. El resto, tan dignos o más que los primeros, llévenselos a otro lugar y expóngalos también. Verán como así se queda contento todo el mundo.

Sabemos, los que nos dedicamos a esto, que los concursos y los Jurados tienen tela de “guasa” y que te arriesgas a cualquier cosa si decides enviar tu obra, aceptando lo que venga. Ya hemos visto de tanto y de todo que nada nos asusta a estas alturas del baile, aunque no nos deja indiferentes el dictamen puntual de cada concurso.

Por el bien de la pintura en Ubrique, por la gran afición y amor que se tiene a este arte, entre todos-as debemos hacer  lo imposible para mejorar los flecos que estropean este hermoso manto; este gran crisol donde confluyen los brillos de los grandes artistas -de fuera y de dentro- que concurren a nuestra llamada año tras año. Que nadie se quede con una mueca de sorpresa en vez de una sonrisa.

Sé que la cosa está muy mala y que las arcas están menguadas. Pero no hacen falta grandes recursos sino buenas ideas y una pizca de voluntad. El que tenga alguna  idea más que la ponga sobre el tapete. Es hora de ponerse manos a la obra.

Y una última cosa más, ¿para cuándo un Museo de la Pintura en Ubrique?

Ahí queda. Gracias.